Estás obstaculizando tu flujo de bienestar y abundancia cuando:
• Te falta enfoque, no tienes clara tu intención
•Conectas con la ambición o el miedo como semilla central de tus acciones y decisiones.
•tienes un diálogo negativo y escaso hacia los demás, las situaciones y ti mismo.
• Cuando no crees en tí mismo
• Cuando piensas que tus problemas y sus soluciones están fuera o es culpa de otra persona.
• Cuando te culpo a tí mismo o a alguien más por tus situaciones
• Cuando crees que las cosas tienen que llegar con esfuerzo y lucha
• Cuando describes la mayoría de las cosas, experiencias y situaciones usando las palabras “caro” y/o “barato”
• Cuando justificas tus limitaciones mentales.
• Cuando tomas decisiones por miedo, escasez o tacañería
• Cuando la intención (lo que quieres) está desconectada de tu atención (lo que haces para que suceda)